La niebla invernal de principios de enero envuelve las calles creando una atmóstera irreal. En el pequeño pueblo alentejano de piedra la calma invita al paseo nocturno.
Jordi Busqué Muchas gracias. El Alentejo portugués tiene un patrimonio natural y humano que merece ser descubierto con tranquilidad. Sebrá recompensar con creces la visita.
2 comentarios:
Muy sugerente esta foto mundorero. La niebla funciona perfectamente para crear este tipo de atmósferas.
Qué ganas de volver a Portugal...
Jordi Busqué
Muchas gracias. El Alentejo portugués tiene un patrimonio natural y humano que merece ser descubierto con tranquilidad. Sebrá recompensar con creces la visita.
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